Este lunes 21 de agosto, el presidente de Ucrania agradeció ante el Parlamento de Dinamarca la promesa de entrega de aviones caza F-16, mientras Rusia advirtió que ese movimiento “escalará” la guerra.
Kiev llevaba meses pidiendo a sus aliados occidentales el suministro de aviones de combate más modernos para repeler los ataques de Moscú, finalmente logró que Países Bajos y el Gobierno danés confirmaran su suministro tras el visto bueno de Estados Unidos, fabricante de las aeronaves.
El Ejército ucraniano señaló que recuperó más terreno que estaba en manos de las tropas invasoras alrededor de Bakhmut.
Mientras el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, celebraba y agradecía la promesa de aviones de combate F-16, en Conpenague, capital de Dimarca, la reacción de Moscú era muy diferente. Dos reacciones que distan frente al anuncio del domingo de Dinamarca y Países Bajos sobre el suministro de los primeros F-16 al Ejército del país invadido.
“El hecho de que Dinamarca haya decidido ahora donar 19 aviones F-16 a Ucrania conduce a una escalada del conflicto. Al esconderse detrás de la premisa de que Ucrania debe determinar las condiciones para la paz, Dinamarca busca con sus acciones y palabras dejar a Ucrania sin otra opción que continuar la confrontación militar con Rusia”, aseguró Vladimir Barbin, embajador de Rusia en Dinamarca, en un comunicado citado por la agencia de noticias Ritzau.
Los primeros seis aviones de combate se entregarán a principios de 2024, una decisión posible después de que el Gobierno de Joe Biden aprobara su entrega el pasado 18 de agosto, ya que los cazas son de fabricación estadounidense.
“Hoy confiamos en que Rusia perderá esta guerra. Juntos demostramos que la vida es un valor, que las personas importan, la libertad importa y Europa importa. También quedará escrito en la historia que Dinamarca está del lado de Ucrania”, afirmó Zelenski ante miles de personas frente al Parlamento de Dinamarca.
Durante su discurso, el mandatario ucraniano recordó lo difícil que ha sido para Kiev convencer a sus aliados occidentales para que aceptaran enviar cazas de combate modernos, con el fin de dar más movilidad y capacidad de reacción a sus fuerzas frente a Rusia y sus ataques. Por ello, Zelenski aplaudió en repetidas ocasiones a los parlamentarios y diputados y alabó “al pueblo danés” y “su liderazgo”.
El ministro de Defensa de Dinamarca Jakob Ellemann-Jensen señaló que Ucrania solo puede usar los F-16 donados dentro de su propio territorio. Es decir que únicamente podrán ser empleados para defenderse y no para ocupar territorio ruso.
“Donamos armas con la condición de que se utilicen para expulsar al enemigo del territorio de Ucrania. Y nada más”, remarcó Ellemann-Jensen este lunes.
Desde hace meses, países de Occidente como Dinamarca están entrenando a pilotos ucranianos en el manejo de los F-16 para que sean capaces de dirigirlos cuando lleguen desde el norte de Europa.
Dinamarca donará 19 aviones de combate a Kiev, pero aún no se sabe cuántos entregará Países Bajos, que tiene 42 F-16 disponibles en total. Sin embargo, aún tiene que decidir si entregará todos.
Tras su visita a Copenhague, Zelenski arribó a Atenas, para reunirse con líderes de la Unión Europea y de los Balcanes. Grecia ha representado un firme respaldo a Ucrania desde que Moscú ordenó la invasión, brindando ayuda humanitaria y armas, incluidos vehículos de combate de infantería y rifles de asalto Kalashnikov.
Kiev anuncia avances en Bakhmut y Zaporizhia
Mientras el presidente de Ucrania celebra la ayuda que viene en camino, su Ejército también reporta avances en el frente de batalla. En concreto, en el este y sur del país.
Según el Ejército ucraniano, sus hombres consiguieron avances al sureste de Robotyne, localidad al oeste de la región de Zaporizhia, ubicada en el sur de Ucrania.
“El enemigo intentó recuperar posiciones al oeste de Robotyne, pero no tuvo éxito”, subrayó Hanna Maliar, la viceministra de Defensa ucraniana.
En Zaporizhia, las tropas ucranianas están luchando para recuperar el control de la ciudad de Tokmak, importante para corredor entre la península de Crimea-en el sur de Ucrania y anexada por Moscú en 2014-y Rusia.
Además, Maliar sostuvo que Moscú falló en otro intento de asalto a Klishchiivka, pueblo en Bakhmut, y que las fuerzas ucranianas también están avanzando hacia esa ciudad, ubicada en el este y perteneciente a la provincia de Donetsk, en el este del país atacado. Esa localidad se encuentra bajo el control ruso desde el pasado mayo después de meses de combates. La semana pasada, las tropas de Kiev indicaron que consiguieron recuperar tres kilómetros cuadrados en esa zona.
Asimismo, la funcionaria de Defensa señaló que la situación en el campo de batalla en la región de Járkov, en el este de Ucrania, es “difícil”, pero que las fuerzas ucranianas están repeliendo los ataques rusos. Además, ratificó que los militares de Kiev recuperaron partes de territorio en el este la semana pasada.
“La situación en la dirección de Kupiansk es difícil. El enemigo no está abandonando los planes para avanzar, el enemigo está reuniendo fuerzas adicionales (…) Confiamos en nuestros defensores, pero allí es muy difícil para ellos y el enemigo no avanza”, sostuvo Maliar.
Las recientes informaciones de Kiev sobre la recaptura de territorios no han sido verificadas de forma independiente, ante las dificultades de acceder al terreno.
