El crecimiento económico de Estados Unidos fue más fuerte de lo estimado para el lapso de julio a septiembre de este año, debido a que hubo más inversión y a un gasto gubernamental mayor de lo esperado originalmente.
La mayor economía del mundo experimentó un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de 5.2% a tasa anualizada en el tercer trimestre, dijo el Departamento de Comercio en un informe.
Los analistas habían anticipado que la tasa se mantendría estable y la revisión está notablemente por encima de la estimación inicial de 4.9% publicada el mes pasado.
La actualización reflejó principalmente revisiones al alza de la inversión fija no residencial y del gasto de los gobiernos estatales y locales”, detalló el Departamento de Comercio.
Los analistas habían anticipado que la tasa se mantendría estable y la revisión está notablemente por encima de la estimación inicial de 4.9% publicada el mes pasado.
Añadió que éstos fueron “compensados en parte por una revisión a la baja del gasto de los consumidores”.
La economía estadounidense ha demostrado ser más sólida de lo esperado, ya que el banco central aumentó rápidamente las tasas de interés el año pasado para combatir la inflación, generando predicciones de una posible recesión.
Pero un gasto de consumo resiliente, respaldado por un mercado laboral fuerte, ha ayudado a evitar una desaceleración hasta ahora.
En general, en el tercer trimestre, la aceleración del crecimiento del PIB reflejó aumentos en el gasto de los consumidores y la inversión en inventarios privados.
Actividad económica se desaceleró
La actividad económica de Estados Unidos se desaceleró desde finales de octubre hasta mediados de noviembre, con las empresas informando que la inflación se moderó en gran medida y que la contratación fue más fácil, según el Libro Beige de la Reserva Federal (Fed), que subraya el debilitamiento del impulso económico en la recta final del año.
La Fed publicó su último informe sobre el estado de la economía un día después de que el gobernador de la Fed, Christopher Waller, señalara que el actual progreso en la reducción de la inflación significa que se vislumbra la posibilidad de una reducción de la tasa de interés el próximo año.
