La peor sequía en España impacta a Europa en el suministro de verduras y frutas.
Los agricultores españoles están luchando para cultivar cosechas, mientras que los ríos y embalses se están secando.
Esto ha llevado a una disminución en la producción de alimentos y un aumento en los precios en toda Europa.
Además, la sequía ha causado incendios forestales y ha dañado los ecosistemas naturales.
Las altas temperaturas , las más altas desde que se tienen registros, y la escasez pluvial están afectando la agricultura y la ganadería, así como en el suministro de agua para el consumo humano.
La situación también está afectando a otros países de Europa, que dependen de las importaciones de productos agrícolas españoles.
Los expertos advierten que se necesita una acción urgente para abordar esta crisis climática.
Según la Agencias Estatal de Meteorología en esta temporada sólo llovió una quinta parte de lo habitual.
Los agricultores del norte del país salieron a protestar por su situación ya que temen por su supervivencia y la de sus cosechas.
“La incertidumbre que está causando la falta de agua y el caos que esto supone si saber si sobrevivirán las cosechas” indicó el agricultor Josep Soler a DW.
Aceite de Oliva un lujo
La sequía en España ha tenido un impacto negativo en la producción de aceite de oliva.
La situación ha llevado a un aumento significativo en el precio del producto.
Las estimaciones indican que la producción de aceite de oliva será un 30% menor que en años anteriores, lo que ha llevado a los productores a aumentar el precio de venta al por mayor.
Los consumidores deberán enfrentar precios más altos en el mercado y la posibilidad de escasez.
Esta situación también afectará a la economía española, ya que el aceite de oliva es uno de los principales productos de exportación.
