Muchas personas hospitalizadas, otros sin un ser querido vivo que estén a su lado, es el drama que actualmente viven los sobrevivientes de la Franja de Gaza, mientras esperan entre llantos su salida para una zona donde puedan estar en paz y tranquilidad
Familiares hospitalizados y otros ya sin un ser querido que los acompañe es lo que viven las personas de Gaza, mientras esperan entre llantos desgarradores en el Hospital Kamal Edwan de esa localidad.
En ese sitio el Dr. Hussam Abu Safiya declaró que, “si quieren matarnos, mátennos, mientras seguimos trabajando aquí, no nos iremos”. El médico sostuvo que necesitan “días y semanas” para asentarse en otro lugar, en respuesta a los ataques que realiza Israel,que ya no sólo son por vía aérea sino también por vía terrestre.
Una sobreviviente en Gazadeclaró a los corresponsales que los atacantes bombardearon sin aviso y mataron a su familia. En este sitio también se encontraba un menor de cuatro años, que se quedó sin familiares tras el ataque.
Este suceso les recuerda a los palestinos al “Nakba”, la catástrofe de 1.948 que obligó a cientos de ciudadanos a abandonar sus hogares como parte del proceso de la creación de Israel.
Autoridades de Gaza mencionaron que al menos 2.450 personas han fallecido y una cuarta parte de esta cifra son niños.Por otro lado, los funcionarios de salud locales tomaron la medida de almacenar los cuerpos en camiones congeladores de helados, pues ya no hay espacio en los hospitales y cementerios.
Ciudadanos de Palestina esperan para poder pasar por la frontera con Egipto. Pero el peligro en el traslado acecha en cada rincón. Los médicos en esa área temen que movilizar a los niños heridos implique un riesgo de peligro muy alto.
Esto se debe a que la mayoría se encuentra en un estado complejo y requiere de equipos médicos que puedan seguir funcionando con electricidad y oxígeno, servicios que han sido interrumpidos por Israel durante la última semana. El recinto cuenta con escaso suministro de combustible y las áreas de emergencia se están quedando sin medicamentos.
Salir de la Franja de Gaza es toda una odisea. Los palestinos se ven obligados a realizar largas caminatas para poder desplazarse hacia el sur de Gaza, pero la travesía se ha vuelto un calvario debido a que Israel continúa con los bombardeos.
Los ciudadanos palestinos se movilizan con raciones de comida a través de la zona de ataques aéreos.
El jefe regional de la Organización Mundial de la Salud, OMS, Ahmed Al Mandhari, señaló que a Gaza le “quedan 24 horas de agua, electricidad y carburante”.
En medio de esta emergencia, la población que reside en el norte de la franja se moviliza al este de Khan Younis, donde reciben raciones de alimentos cocinados con leña por los locales.
El estado de Israel insiste en que los palestinos deben seguir abandonando el lado norte para que se dirijan hacia el sur, en tanto que Hamás contradice esta orden e insiste a la población en que las carreteras de escape no son seguras para nadie.