Hassan Nasrallah, lÃder de Hezbolá advirtió que si Israel inicia operaciones en el LÃbano, el grupo chiita intensificará sus ataques con misiles y militares de otros paÃses se unirÃan. Aunque las dos partes han encarado un enfrentamiento de décadas, en los últimos ocho meses, desde que detonó la guerra en curso en Gaza, el Ejército de Israel y Hezbolá han aumentado el cruce de fuego entre el territorio israelà y el LÃbano. Los ataques han causado muertos y heridos a ambos lados de la frontera, mientras aumentan los temores de que la ofensiva de las tropas del Estado de mayorÃa judÃa contra Hamás-respaldado por el movimiento chiita- en el enclave palestino pueda ampliarse a un conflicto regional.
Las tensiones entre Israel y el LÃbano aumentaron, luego de que el Ejército del paÃs de mayorÃa judÃa anunciara que fue aprobado un plan para una ofensiva contra su vecino paÃs, en medio de la escalada de enfrentamientos con el grupo chiita Hezbolá.
«En el marco de la evaluación de la situación, los planes operativos en vista de una ofensiva en el LÃbano fueron aprobados y validados y se tomaron decisiones para seguir la preparación de las tropas en el terreno», señalaron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) el martes 18 de junio.
El cruce de fuego entre el norte de Israel y el sur del LÃbano ha aumentado desde que las tropas de la nación dirigida por Benjamin Netanyahu iniciaron la guerra en curso en Gaza, contra Hamás, grupo respaldado por Hezbolá.
El pasado 5 de junio, el primer ministro israelà advirtió que su paÃs está preparado para una acción contundente en la zona limÃtrofe.
Sus declaraciones tuvieron lugar durante un recorrido con mandos militares en la frontera norte de su paÃs con LÃbano, donde remarcó que su Gobierno está decidido a restablecer la seguridad en esa zona.
«Quien piense que puede hacernos daño y que nos quedaremos de brazos cruzados comete un gran error. Estamos preparados para una acción muy fuerte en el norte. De un modo u otro restableceremos la seguridad en el norte», sostuvo Netanyahu.
LÃbano encara una posible mayor escalada de enfrentamientos, mientras la comunidad internacional teme que este sea un paso contundente para una posible extensión de la guerra en Gaza a un conflicto regional.