El Etna atraviesa una de sus frecuentes erupciones que suelen cubrir de ceniza las ciudades sicilianas a su alrededor.
El monte Etna entró en erupción este domingo 21 de mayo. Lanzó más de 10 kilómetros de lava y arrojó cenizas sobre Catania, la ciudad más grande del este de Sicilia, dejando una gruesa capa de ceniza sobre la pista de aterrizaje del aeropuerto de Catania, lo que obligó a suspender los vuelos en Fontanarossa, el aeropuerto internacional de la ciudad de Catania, en Sicilia (sur de Italia) debido a la copiosa cantidad de ceniza volcánica en la superficie del aeropuerto.
Las actividades de los vuelos volvieron a su normalidad luego de las cancelaciones del fin de semana.
Según testigos, las primeras explosiones ocurrieron cerca de las 08H00 hora local, seguidas de lluvias de ceniza y escoria volcánica. En la mañana se escucharon fuertes ruidos provenientes del Etna, especialmente en las localidades de Adrano y Biancavilla, en su ladera suroeste, justo la dirección prevista en la dispersión de la nube.
La Defensa Civil de Sicilia emitió una alerta roja el jueves pasado en la zona del Etna por la “muy alta probabilidad de caída inminente o en curso de ríos de lava”.
Con sus 3.324 metros,el Etna es el volcán activo más alto de Europa y ha entrado en erupción con frecuencia en los últimos 500.000 años.
El Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología de Italia (INGV) que monitorea de cerca el Etna con instrumentación en las laderas, notó que la capa de nubes en un día lluvioso impedía ver la erupción, que a menudo ofrece una exhibición espectacular de lava en llamas durante las expulsiones poco frecuentes del volcán.
El INGV indicó que el monitoreo había registrado evidencia de un aumento en la actividad de temblores en los últimos días.
La agencia nacional deProtección Civil de Italia indicó el jueves en una alerta que, en vista del aumento de la actividad volcánica, podrían ocurrir variaciones “repentinas” de la actividad del Etna.
A principios de 2021, una erupción del volcán duró varias semanas.
