Según una información de la Agencia Reuters la petrolera venezolana acumula 21.200 millones de dólares, en cuentas por cobrar después de utilizar intermediarios escasamente conocidos para poder exportar petróleo en medio de las sanciones impuestas por Estados Unidos.
El valor de los cargamentos no pagados alcanza el 84% del total de los envíos facturados por PDVSA, esta es la causa por la que Pedro Tellechea congeló los contratos de suministros al asumir la presidencia de la petrolera estatal.