Descubren un colosal cañón submarino en el Mediterráneo. El enorme cañón submarino de unos 10 kilómetros de ancho y 500 metros de profundidad se formó en el fondo del mar Mediterráneo oriental hace unos 6 millones de años.
Utilizando análisis geofísicos, investigadores del instituto de investigación Geological Survey of Israel (GSI) en Israel descubrieron el enorme cañón submarino, de principios del periodo Messiniense, durante la crisis de salinidad mesiniana, cuando el nivel del mar bajó y la salinidad aumentó.
Un evento geológico que involucró a los sistemas de la hidrósfera, la biósfera, la litósfera y la atmósfera.
El Mediterráneo es el mar más grande del océano Atlántico. Se sitúa entre Europa, Asia y África, extendiéndose sobre una superficie de 2,5 millones de km² entre el Estrecho de Gibraltar y la costa occidental de Oriente Medio.
El descubrimiento fue publicado en un artículo en la revista científica Global and Planetary Change.
Características y cómo se formó
El cañón lleva el nombre de Eratóstenes y más concretamente, el cañón está situado en la Cuenca de Levante, cerca del vecino monte submarino Eratóstenes, de ahí su nombre.

Resulta que, debido al movimiento de las placas tectónicas, la conexión entre el Atlántico y el Mediterráneo se cerró, aislando el mar del océano. Como resultado, partes del Mediterráneo se secaron durante unos 700.000 años, dejando tras de sí una vasta extensión de sal de hasta 3 km de espesor.
A medida que descendía el nivel del mar, las corrientes cada vez más saladas avanzaron más rápido que el agua circundante y erosionaron gradualmente el fondo del mar, abriendo barrancos de varios cientos de metros de profundidad a lo largo de las costas más escarpadas del mar Mediterráneo, formando este cañón.
Este descubrimiento arroja luz sobre un debate que lleva décadas: si los barrancos y cañones de Messina se formaron encima o debajo de la superficie del mar. “Esta nueva evidencia refuerza los argumentos de que al menos parte de la erosión en los márgenes continentales ocurrió bajo el agua”, dijeron los investigadores.
Argumentamos que el aumento de la salinidad al comienzo de la crisis y un posible descenso limitado del nivel del mar habrían desencadenado corrientes gravitacionales, desestabilizando el margen continental y ahuecando el lecho marino allí donde era lo suficientemente escarpado, dijeron los autores de la investigación.
Fuente:
Moneron, J. et al. Discovery of the Messinian Eratosthenes Canyon in the deep Levant Basin. Global and Planetary Change, 232, 2024.