Por: Amenhotep Planas Raga / CNP: 7525
La Casa Grande continúa presentando numerosos problemas para su preservación a corto y mediano plazo: la falta de concienciación es uno de ellos según Alfredo Borges, presidente de la Federación Ambientalista Internacional.
Nuestro planeta está cambiando conforme los humanos lo vamos lastimando; al aumentar la contaminación y la emisión de gases efecto invernadero. Ante esto, La Tierra está enfrentando diversos desafÃos, los cuales se encuentran dentro del informe Frontiers 2017.
En ese informe se da a conocer que los principales desafÃos que enfrenta la Tierra son:
Resistencia a los antimicrobianos
Nanomateriales
Sobreexplotación de las áreas marinas
Tormentas de arena y polvo
Barreras de entrada para la energÃa limpia
Migraciones climáticas
Resistencia a los antimicrobianos.
1.- Resistencia a los antimicrobianos
A pesar de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya lo habÃa alertado, todavÃa se está desarrollando la resistencia a los antimicrobianos, es decir, que las bacterias simples que antes podÃan tratarse sin algún problema, pero ahora podrÃan llevar a la muerte en el futuro.
Cabe mencionar que anualmente 700 mil personas mueren porque los fármacos resultan ser menos efectivos que antes.
El 36% de la población consume antibióticos, y son más desde que comenzó el milenio. Se estima que para 2030, este porcentaje crezca hasta el 67%. El informe Frontiers 2017 aboga por una mayor regulación en esta materia y por fomentar el compromiso del conjunto de la población.
2.- Nanomateriales
Los nanomateriales se usan normalmente en la industria alimentaria, cosmética, productos de higiene, desinfectantes, ropa o dispositivos electrónicos.
Para aprovechar a pleno su potencial, sostiene el informe, que hay que determinar el impacto que generan en el medioambiente y en la salud.
De acuerdo con El PaÃs, algunos materiales en su versión nano son objeto de estudio por un posible vÃnculo con inflamaciones pulmonares, la alteración de la función de determinados órganos o del sistema inmunitario, daños a la piel y a los ojos.
3.- Sobreexplotación de las áreas marinas
La pesca indiscriminada afecta completamente al cambio climático y a las especies ya que ésta es la principal amenaza para su protección.
En el informe se advierte de que estamos consumiendo los recursos del mar más rápido de lo que los ecosistemas pueden regenerarlos.
Las áreas protegidas conforman el 14.4% de las áreas costeras y marÃtimas, una cifra que rebasa el objetivo del 10% que se fijó para 2020.
Distintos estudios demuestran que el énfasis tiene que estar tanto en la cantidad de agua bajo protección como en la calidad de la atención.
Para ONU Medio Ambiente una estrategia que pueda definirse efectiva tiene que ser inclusiva y basarse en el compromiso de la sociedad en su conjunto en reducir su huella en el ecosistema.
4.- Tormentas de arena y polvo
Este fenómeno que se presenta en distintas partes del mundo, puede generar o complicar el asma. Además de que desata diversas enfermedades, la destrucción de infraestructuras, contaminación en el suelo y desertificación.
5.- Barreras de entrada a la energÃa limpia
A pesar de los avances en la tecnologÃa y la implementación de la energÃa limpia en distintas partes del mundo, todavÃa quedan cerca de mil cien millones de personas que no pueden accesar a la energÃa limpia.
Cada ve, estos sistemas son más baratos y, además de reducir el riesgo de incendios y la contaminación de interiores, permiten a las familias ahorrar frente a la compra de combustible.
Según El PaÃs, los autores de Frontiers 2017 insisten en la importancia de polÃticas especÃficas que pueden fomentar el desarrollo de la energÃa verde, generando al mismo tiempo empleo.
El informe, se alerta también de la necesidad de pensar en una gestión sostenible de los residuos generados por los productos solares.
6.- Migraciones climáticas
El cambio climático y la degradación del entorno están redibujando el mapa del mundo. A finales de 2016, los desplazados forzosos por causas naturales o por conflictos sumaban 65 millones, una cifra récord desde la Segunda Guerra Mundial. Cada año 21,1 millones de personas se ven obligadas a abandonar sus hogares por motivos medioambientales.
El rápido incremento de población también contribuye a exacerbar la competencia por los recursos naturales. En los últimos 70 años, al menos el 40% de los conflictos nacionales estaba relacionado con el control de tierra o agua.
Los movimientos de población, recuerda el informe, afectan el medioambiente, degradando el entorno y contribuyendo asà a prolongar la crisis humanitaria o empeorando las relaciones con la comunidad de acogida.