Los impuestos a las ganancias que pudieran llegar hasta un 35% planteados por lo que será el gobierno de Gustavo Petro, sin dudas llenará el bolsillo del gobierno que tendrá más dinero para pagar la burocracia política que entrará a trabajar al estado a partir del 7 de agosto 2022. Sin embargo, esos impuestos acelerarán al mismo tiempo el índice inflacionario que golpeará fuertemente los bolsillos de la ciudadanía colombiana. Entonces veremos las cuentas del gobierno petrista full de pesos colombianos y al mismo tiempo veremos las deficiencias económicas en la ciudadanía, quien al final terminará pagando todos esos impuestos.
Según fuentes de lo que será el gobierno petrista a partir del 7 de agosto, con la reforma tributaria que buscan implantar, aspiran recaudar 50 billones de pesos en su primer año. Para los analistas económicos esa reforma tributaria más que cobrar impuestos a los industriales y empresarios, en la práctica será meterle la mano en el bolsillo al pueblo, el mismo que votó por Petro en la segunda vuelta del 19 de junio 2022. Sostienen que industriales y empresarios fácilmente pueden subir los precios a los productos, lo mismo harían los comerciantes insertados en la cadena de comercialización, mientras que el consumidor final, o sea el pueblo, no puede bajar los precios y termina pagando los establecidos por la cadena de comercialización.
El ministro de Hacienda designado, José Antonio Ocampo, confirmó que la reforma tributaria que planteará el gobierno de Gustavo Petro llegará al Congreso Nacional en menos de dos semanas, dice que: “Nos han pedido presentarla lo más pronto posible y esperamos radicarla el 8 de agosto, un día después de la posesión”. Esto indica que una de las primeras medidas que tomará Petro como presidente será la reforma tributaria, que como ya es sabido, aumentará la inflación y golpeará fuertemente el bolsillo de los colombianos. Hay que recordar que el gobierno de Petro al principio decía que solo aumentarían los impuestos a pocos productos puntuales, pero ahora se han destapado con una reforma tributaria para que no se salve nadie.
