Hoy se cumplen cinco meses del secuestro y posterior asesinato del exteniente venezolano Ronald Ojeda en Santiago, crimen que según el Ministerio Público “se organizó y se solicitó desde Venezuela”.
Un asesinato que se considera de corte político, debido al carácter de activo disidente al régimen de Nicolás Maduro de la víctima.
En el operativo para llevar a cabo el homicidio de Ojeda participaron al menos siete personas. De ellos, dos están detenidos. El primero es «Ángel», un adolescente venezolano de 17 años que fue capturado en marzo, mientras que el segundo fue arrestado el viernes pasado en un paso fronterizo entre Panamá y Costa Rica, país que lo identificó, arrestó y que promete enviarlo de regreso a Chile dentro de unos meses para enfrentar a la justicia.
Se trata del venezolano Maickel Villegas Rodríguez (26), hombre ligado al Tren de Aragua y que prestó cobertura a los perpetradores materiales del plagio de Ronald Ojeda, trasladando en un segundo auto a parte de los secuestradores.
Primero, la noche del crimen cargó combustible en una estación de servicio mostrando su rostro a las cámaras de seguridad y dando su RUT para acumular puntos.
Segundo, al intentar ingresar a Costa Rica lo hizo con total confianza, con su pasaporte y nombres reales.
Pese a esa impericia, Villegas «fue trasladado con seguridad reforzada por la amenaza de estar ante un asesino profesional», relató el ministro de Seguridad Pública de Costa Rica, dando detalles de su detención.
– ¿Cómo se desarrolló la detención de Villegas?
-En esa frontera (Paso Canoas) ingresan de 2.000 a 3.000 personas diarias, la mayor parte ciudadanos venezolanos en ruta hacia los Estados Unidos. Él pensó que por el volumen de la gente en la que él iba metido, dentro de esa masa humana no iba a ser detectado. Pues creemos que se confió. Como ya había pasado por Panamá y quizás por otros países y no había sido detectado, pues me parece que pensó que iba a suceder lo mismo al momento de ingresar a Costa Rica.
La extradición del investigado
El 5 de marzo Maickel Villegas fue identificado como uno de los participantes del crimen de Ojeda ante la prensa, pero no fue hasta el 11 de marzo que se emitió una orden de detención en su contra. Se cree que ya era demasiado tarde, pues días antes la señal de su celular se ubicó en Arica, lugar desde donde habría abandonado Chile.
Tras la detención de Villegas, las autoridades costarricenses contactaron a la embajadora de Chile en Costa Rica, Margarita Portuguez, y por la noche el canciller de ese país recibió la llamada del ministro de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren agradeciendo el trabajo de la policía de Costa Rica y advirtiendo el inicio de una solicitud de extradición para que el venezolano enfrente aquí su responsabilidad por la muerte de Ojeda.
El pasado miércoles 17 de julio la Corte de Apelaciones de Santiago acogió la solicitud de extradición de Villegas y el fiscal coordinador de los Equipos de Crimen Organizado y Homicidios (Ecoh) del Ministerio Público, Héctor Barros, afirmó que el detenido debería llegar a Chile «antes de fin de año».
De hecho, el Ministerio Público de Costa Rica informó que este lunes Villegas fue puesto a disposición del Tribunal Penal de San José, el que decretó su detención hasta el 15 de septiembre. No se le tomó declaración alguna.
–No hay un tratado de extradición entre Chile y Costa Rica, ¿cómo funcionará su extradición?
-Bueno, lo primero que hacemos una vez que llegan los requerimientos de extradición de Chile, es que lo recibe nuestra Cancillería, que pasó la documentación a la Corte Suprema de Justicia. La Corte emitió una resolución judicial ordenando el arresto y puesta a disposición judicial de esta persona (lo que ocurrió el lunes). Él mismo es trasladado a partir de esa resolución judicial desde nuestro centro de detención migratoria, donde estaba retenido bajo medidas administrativas, y pasa ya a disposición judicial, e inicia formalmente el procedimiento de extradición. Entonces ya se hizo la debida entrega por parte de la policía de Migración a las autoridades judiciales. (Actualmente) está en las celdas judiciales ubicadas en la capital, en el complejo central judicial. (Están al lado de los tribunales) para una rápida disposición ante un juez.
– ¿Este centro penitenciario es de alta seguridad?
-Es para criminalidad común. Eso lo valora internamente quien manejan el centro. Si hay perfil peligroso, se le tiene en una celda individual para que no se mezcle con otros sujetos y muy probablemente, eso sea.
– ¿No se le deporta a Venezuela dada la orden de detención de Interpol?
– Exactamente. Prevalece la alerta de Interpol y además nosotros inmediatamente contactamos con las autoridades chilenas y las mismas ya presentaron formalmente su proceso de extradición. Eso hace que la deportación a Venezuela quede denegada ante la vigencia de un proceso de extradición a Chile.
-El fiscal general de Venezuela (Tarek William Saab) pidió a Costa Rica poder interrogar a este detenido, qué le parece esto…
-A través de información de medios de prensa de Costa Rica, se da cuenta de esa solicitud de las autoridades venezolanas, de su interés de identificarlo, primero, y entrevistarlo. Como él está a disposición judicial, la procedencia de esta solicitud la determinará el juez que lleva el caso.
Saab ha criticado ácidamente el trabajo del Ministerio Público respecto de la investigación del Caso Ojeda e incluso aseguró que los asesinos del exteniente no están en su país. En mayo también envió a Chile -sin mayor anticipación- a dos fiscales venezolanos a recabar información sobre el caso, sin que pudieran reunirse con el fiscal nacional o con el fiscal Barros. Sí se juntaron con el jefe de la Unidad de Cooperación Internacional de la Fiscalía chilena en Santiago y con el abogado de la familia Ojeda.