Núñez Feijóo es favorito en las encuestas, aunque tendría que verse obligado a pactar con Vox para formar Gobierno.
Los dos grandes candidatos a la presidencia del gobierno, el socialista Pedro Sánchez y el popular Alberto Núñez Feijóo apuran sus opciones de sumar los votos necesarios para la victoria.
«El minuto y resultado de esta campaña electoral está claro», decía Sánchez en un mitin en el País Vasco. «La derecha instalada en la mentira y nosotros en la remontada».
Lo cierto es que los sondeos dan de momento la victoria al Partido Popular, aunque todo hace prever que no alcanzará la mayoría absoluta. A partir del lunes 24 los pactos se antojan fundamentales para formar Gobierno.
«Quedan cinco días para lograr un cambio histórico en España», decía por su parte Núñez Feijóo en su mitin, asegurando que «el sanchismo es pactar lo que sea, con quien sea para gobernar como sea el tiempo que sea».
El domingo 23, los españoles decidirán: continuidad, o cambio. Y para ello serán claves otros dos partidos, de extrema izquierda y extrema derecha respectivamente: Sumar y Vox.
Parece muy poco probable que tanto PSOE como PP puedan formar Gobierno sin entenderse con estos partidos, liderados respectivamente por Yolanda Díaz y Santiago Abascal. El número de votos que obtengan estas formaciones se antoja por tanto vital para el futuro del país. 37 millones y medio de votantes tienen la última palabra.
A lo largo de los últimos meses, Feijóo ha insistido en que puede gobernar en solitario sin Vox, si bien esto podría requerir la abstención de la izquierda, algo muy improbable.
Muchos de los presentes en Castelldefels, la rica localidad costera cercana a Barcelona donde Alberto Núñez Feijóo llevaba a cabo una de sus mítines electorales, tenían claro haber estado con el próximo presidente del Gobierno de España. A menos de dos semanas de las elecciones anticipadas del 23 de julio, así lo parece.
Y es que las muchas encuestas que se publican estos días predicen que Feijóo, actual líder del PP, obtendrá más votos que el gobernante Partido Socialista, aunque también señalan que los populares no conseguirán la mayoría, teniendo que apoyarse en el partido de extrema derecha Vox.
El tecnócrata aburrido
A lo largo de los últimos meses, Feijóo ha insistido en que puede gobernar en solitario sin Vox, si bien esto podría requerir la abstención de los socialistas y del partido de extrema izquierda Sumar, algo que ambos, hasta ahora, se han negado a hacer.
Feijóo se define a sí mismo como un «tecnócrata aburrido», en contraste con el presidente socialista Pedro Sánchez, apodado por algunos «El Guapo» por su aspecto de estrella de cine.
Ambos se enfrentaron el lunes por la noche en un caótico debate televisivo que, según los observadores, ganó Feijóo, o más bien perdió Sánchez.