La venezolana suma ya dos años y dos meses sin conocer la derrota en triple salto y esta vez ganó por aplastamiento, es decir, repitió en dos oportunidades la distancia alcanzada.
Tras superar el mal comienzo y el susto de los Mundiales de Budapest, el cual resolvió después de calmarse y dominar sus nervios. Resuelto el problema alcanzó el éxito al final, Yulimar Rojas. En esta oportunidad, con un gran dominio de sí misma, con arrojo y mucha seguridad, Juli volvió a dominar el pasillo largo del foso del atletismo con una victoria arrasadora por aplastamiento, en la Weltklasse de Zúrich, la undécima parada de la Diamond League,
Con este triunfo la venezolana suma dos años sin conocer la derrota en triple salto. Rojas venció con un salto de 15,15 (repitió dos veces la misma medida), 37 centímetros más largo que el de la segunda, la jamaicana Shanieka Ricketts, quien tuvo también una destacada actuación.
Rojas definió casi desde el principio la competencia. Con un ligero viento en contra (-0,8 m/s) voló a los 15 metros, una barrera que esta temporada de todas las participantes sólo habían rebasado la venezolana y la subcampeona mundial Bekh Romanchuk en la final de Budapest.
Para el cuarto salto, 15,15, con 0,2 a favor, ya tenía garantizada la victoria. Ninguna atleta ha saltado por encima de esa distancia desde 2014, salvo Yuli, que lo ha hecho 17 veces, incluyendo la de Zúrich, tres en pista cubierta. Nada cambió hasta el final y la cuádruple campeona mundial prolongó una racha victoriosa que se extiende desde el 9 de julio de 2021, cuando la absurda medida del último salto -que permanece y que resolvió con otro 15,15- la hizo claudicar, tras un nulo, ante Ricketts.