El presidente ruso reconoció, en su primer mensaje público desde el final de la revuelta, la «resistencia, unidad y patriotismo» de sus compatriotas y destacó que se tomaron «todas las medidas necesarias para evitar un derramamiento de sangre».
Putin ratificó que los combatientes rebeldes de Wagner pueden unirse al Ejército ruso o «ir a Belarús». Horas antes, en un audio de 11 minutos difundido este 26 de junio, el jefe del grupo de mercenarios, Yevgeni Prigozhin, defendió su breve sublevación contra el Kremlin y aclaró que no pretendía deponer al Gobierno ruso, sino proteger a sus hombres.
El presidente ruso Vladimir Putin se dirigió a su nación en un mensaje de video en la televisión estatal y agradeció a sus compatriotas por mostrar «unidad» después de que la rebelión armada de Wagner durante el fin de semana fuera abortada menos de 24 horas después de su comienzo.
El mandatario ruso también agradeció a la mayoría de los mercenarios de Wagner por no permitir que la situación se deteriore hasta convertirse en un «derramamiento de sangre». A su vez, remarcó que se tomaron todas las medidas necesarias para proteger al país y al pueblo de la rebelión.
«Desde el comienzo de los eventos, bajo mis órdenes se tomaron medidas para evitar un derramamiento de sangre a gran escala», subrayó Putin en el discurso televisado, agradeciendo a los rusos su «resistencia, unidad y patriotismo».
“Era precisamente este fratricidio lo que querían los enemigos de Rusia: tanto los neonazis en Kiev como sus patrocinadores occidentales, y todo tipo de traidores nacionales. Querían que los soldados rusos se mataran unos a otros», advirtió.
Asimismo, el mandatario ruso pareció ratificar las condiciones del acuerdo mediado por el presidente bielorruso Alexander Lukashenko para detener la rebelión al señalar que los combatientes de Wagner pueden unirse al Ejército ruso o «ir a Belarús».
«No queríamos derrocar al Gobierno ruso»: Prigozhin reaparece tras su fallida rebelión
Por su parte, el jefe del grupo ruso de mercenarios, Yevgeni Prigozhin, hizo su primer pronunciamiento público luego de que el pasado sábado se revelara contra la cúpula del Kremlin y ordenara a sus hombres marchar hacia Moscú.
“Fuimos a demostrar nuestra protesta y no a derrocar el poder en el país”, aseguró Prigozhin en un audio de 11 minutos difundido este lunes 26 de junio.
Son sus primeras declaraciones públicas luego de la breve insurrección e inédito movimiento, en el que exigía la salida del ministro de Defensa Sergei Shoigu y del jefe del Estado Mayor del Ejército ruso, Valeri Guerásimov. Tras semanas de arremeter contra el Kremlin por una presunta escasez de armas, el sábado el hombre que fue cercano a Vladimir Putin acusó a las tropas rusas de bombardear a sus combatientes.
Un enfrentamiento de rusos contra rusos, calificado como un intento de golpe de Estado, que según algunos expertos puso al descubierto la debilidad de la Administración de Putin, en medio de la invasión que ordenó contra su vecino país hace 16 meses.