Según proyecto de la NASA se construirán edificios en la luna en 2040 como parte de un proyecto.
La NASA ha estado explorando otras opciones para la vida humana durante mucho tiempo.
Las investigaciones se intensificaron lo que hemos estado viviendo a raíz del cambio climático.
Según un informe original del New York Times, la agencia espacial estadounidense planea enviar una impresora 3D a la Luna.
Asimismo intentarán utilizar el fino polvo de la superficie lunar para fabricar concreto, a pesar de que el polvo es altamente tóxico.
Los científicos creen que pueden hacerlo seguro, dándole un uso adecuado como han hecho antes con materiales terrestres.
Varias expediciones tendrán lugar antes de que los planes de construcción para 2040 se hagan realidad.
La primera expedición tuvo lugar en noviembre pasado, cuando Artemis I viajó a la Luna y la orbitó con solo robots a bordo.
Artemis II está programada para partir de la Tierra en noviembre de 2024 con una tripulación de cuatro personas.
Artemis III será la primera vez que los humanos pongan un pie en la Luna en 50 años y está planeada para 2025.
Nada fácil
Jennifer Edmunson, geóloga principal del proyecto en el Centro de Vuelo Espacial Marshall, habló con el diario.
Dijo que si hay alguna esperanza de que el plan se haga realidad en los próximos 17 años, las cosas deben comenzar a moverse.
«Lo primero que debe suceder es una prueba de concepto. ¿Podemos manipular el suelo en la superficie lunar en un material de construcción?
Necesitamos comenzar este desarrollo ahora si vamos a lograr hábitats en la Luna para el año 2040″.
La NASA se ha asociado con ICON, una empresa tecnológica de construcción con sede en Texas.
La empresa diseña nuevas tecnologías para construir hogares modernos y sostenibles, para alcanzar su ambiciosa meta.
Según informa The Mirror, esperan desarrollar un sistema de construcción espacial.
Afirman que podría utilizarse para imprimir desde casas lunares hasta plataformas de aterrizaje de cohetes».
El Departamento de Policía de Nueva York planea pilotear aviones no tripulados en respuesta a quejas sobre grandes reuniones.