La energía del momento es de fiesta, y lo celebramos con la entrada de Júpiter en Aries. Desde el 21 de diciembre del 2022 entró el planeta Júpiter al signo de Aries, esto potencia la celebración, el positivismo, la comunicación, las ganas de crecer. Para entender más y aprovechar este tránsito lo analizamos por separado signo y planeta.
El signo Aries, es el más individual, obedece al “yo soy”, por lo que la entrada del planeta que hace crecer y ampliar el lugar que transita se verá reflejado de forma individual en ganas de hacer, de conquistar, de hacerse entender, de expresar nuestra pasión.
Del 20 al 21 de diciembre, dependiendo del lugar geográfico que se tome de referencia, estará entrado Júpiter en Aries para quedarse hasta el 20 de mayo del 2023. Este tránsito tiene varias características particulares, la primera es que será un tránsito corto, ya que Júpiter suele estar alrededor de 12 meses por cada signo y este será de sólo 5 meses, luego será un tránsito sin pausa, ya que no experimentará ninguna retrogradación en su tránsito, ósea estará entrando y sin pausas por el signo de Aries.
Todo esto da en conclusión que la casa astrológica o casas en las que ocurra este tránsito las veremos avanzar durante 5 meses al máximo, aún la energía no se siente tan activa porque el planeta Marte, que es el regente del signo de Aries se encuentra retrogradando en Géminis, pero esto termina pronto, y es cuando todas las energías apoyan para el avance, y es que Marte estará directo a partir del 13 de enero del 2023 y junto a Júpiter la energía de avance será indetenible.
Este artículo de cierre tiene también la intención de invitarlos a la reflexión de lo que a nivel personal significó el año que despedimos. La mejor forma de arrancar algo nuevo, como es el caso del nuevo año, es tener la casa en orden, y al referirme a casa es la que tenemos en el interior nuestro, sea a nivel mental o espiritual, que son los motores de funcionamiento en este plano físico.
La energía que ha estado presente desde el 2008 con el tránsito del planeta Plutón en Capricornio, se hizo notar con un cambio a nivel social muy importante, y recién en marzo del 2023 luego de casi 15 años de su tránsito pasa a un signo de libertad como lo es Acuario, en el que se quedará durante 20 años.
Al referirme a cierres y aperturas, los dos tránsitos planetarios más contundentes son: En temas de cierre, el cambio del tránsito de Plutón en Capricornio hacia Acuario, que ocurre en marzo del 2023, y se queda hasta junio del próximo año, luego retrograda y vuelve a Capricornio, pero en el 2024 ya se queda en Acuario.
En temas de apertura, la entrada de Júpiter en Aries, que es intensa porque serán solo 5 meses de tránsito directo, que además en enero se suma al planeta Marte regente de Aries, para definir todos los cambios a nivel mental donde la expresión individual será la que más se haga sentir.
La visión personal que tengo de hacia dónde marca la energía del cielo para la humanidad para este 2023, es una energía de libertad, de inclusión, de coraje para atreverse a expresar la individual considerando al conjunto y esto es un éxito.
Por otro lado, hay más tránsitos de los que conversar y es la entrada de Saturno en el signo de Piscis en marzo del 2023. La energía de este signo es la energía de lo que se siente, pero no se toca, la energía de lo intangible, de la disolución de los límites, y al entrar un planeta adulto como Saturno, que da limites desde la sabiduría, se verán avances en los estudios de la mente, del sueño, del funcionamiento neurológico. Creo que veremos en dos años y medios la concreción de muchos estudios en estas áreas dar sus frutos, incluidos enfermedades autoinmunes que obedecen a Neptuno y al signo de Piscis.
Para cerrar les quiero desear desde esta pequeña tribuna de astrología que los regalos a recibir sean tesoros que enriquezcan el alma y la calidad de su vida por este tránsito de vida en un planeta que es el hogar de todos.