El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, llegó a Nicaragua, la segunda parada de su primera gira latinoamericana, que comenzó el 12 de junio en Venezuela y concluirá en Cuba.
El mandatario del país asiático aterrizó en la ciudad de Managua, en el Aeropuerto Augusto C. Sandino, donde fue recibido por el canciller nicaragüense Denis Moncada y otros funcionarios del Gobierno del país centroamericano, en un acto que tuvo por escenario la Plaza de los No Alineados, en el antiguo centro histórico capitalino destruido por el terremoto de 1972.
Horas más tarde, se reunió con el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega.
Durante el acto oficial de recibimiento, Raisi destacó que las relaciones con los países de América Latina tienen un carácter estratégico en diferentes campos.
«No son relaciones habituales, tradicionales, son relaciones completamente estratégicas. Nosotros queremos incrementar y profundizar nuestras relaciones en todas las áreas, políticas, económicas, culturales. Y en todos los ámbitos; sobre todo en materia de ciencia y tecnología», aseguró el mandatario persa en el acto oficial de recibimiento.
El jefe de Estado de la nación centroasiática destacó la coincidencia histórica del triunfo de la revolución Islámica en su país y la Sandinista en Nicaragua, ambas en 1979, hechos que consideró como «señales de Dios».
Ambos mandatarios coincidieron en criticar de manera frontal la posición de Estados Unidos ante los procesos políticos en curso en los dos países.
«EEUU quiso paralizar a nuestro pueblo con amenazas y sanciones, pero no lo ha logrado», expresó el líder iraní al tiempo que defendió el carácter democrático del sistema político que rige en la nación persa.
En alusión a Estados Unidos en particular y Occidente en general, las calificó de «potencias diabólicas e imperialistas», ante las cuales se está formando un nuevo orden mundial para derrotarlas.
Por su parte, Daniel Ortega dedicó una parte de sus palabras de bienvenida a homenajear al general iraní Qasem Soleimani, víctima mortal de un ataque estadounidense con drones, el 3 de enero de 2020 en el aeropuerto de Bagdad. El jefe de Estado anfitrión pidió un minuto de silencio para «el héroe de la Revolución Islámica».
La delegación que acompaña a Ebrahim Raisi está integrada por la primera Dama, Jamileh Alamolhoda, y los ministros de Salud, Petróleo, Cultura y Diplomacia Económica.
La vicepresidenta del país centroamericano, Rosario Murillo, adelantó que en el programa oficial de bienvenida tendrán protagonismo orquestas y coros infantiles y juveniles, que lo agasajarán con obras del folclore nicaragüense.
Antes de su cita en Managua, Raisi realizó una visita oficial a Venezuela, donde tuvo un encuentro con el presidente Nicolás Maduro, con quien coincidió en la iniciativa de consolidar un mundo libre de hegemonías y sanciones dictadas desde un solo país o bloque.
«Se ven todas las señales de que el nuevo orden mundial ya viene en camino y se está estableciendo. En este nuevo orden mundial los países soberanos e independientes tendrán los puestos principales y las potencias imperialistas claramente se ve que están en su punto de decadencia», afirmó el presidente de Irán en Caracas.
Raisi concluirá su visita a Nicaragua este 14 de junio, después de visitar en la mañana la sede de la Asamblea Nacional (parlamento unicameral).
Acto seguido, el mandatario asiático partirá a La Habana, última escala de su gira latinoamericana.
