La pandemia de la Covid-19 hizo grandes cambios en esta industria y generó grandes pérdidas económicas, reitera la Organización Mundial del Turismo.
El turismo está experimentando una transformación significativa, marcada por la adaptación de la industria a las cambiantes necesidades de los viajeros.
La pandemia de la Covid-19 hizo grandes cambios en esta industria y generó grandes pérdidas económicas.
Entre 2019 y 2022, se registraron pérdidas por valor de 2.6 mil millones de dólares debido a las restricciones de viaje, de acuerdo a la Organización Mundial del Turismo.
El estudio de Another, agencia de comunicación, destaca cómo el turismo en América Latina ha evolucionado para ser más accesible y acorde con un estilo de vida digital.
El acceso a información en tiempo real, alojamientos alternativos, opciones de transporte más asequibles y un cambio en las preferencias de los turistas marcan los cambios.
Los resultados
Nace un nuevo perfil de viajeros tras el Covid-19 y el estudio de Another destaca cinco nuevos perfiles de viajeros en la era postCovid-19.
En primer lugar está el viajero experiencial que es aquel que busca experiencias únicas y auténticas en destinos no convencionales.
Este tipo de viajero se preocupa por apoyar a las comunidades locales y se sumerge en la cultura local.
En segundo lugar está el viajero sin culpa que es aquel que valora la relajación y la desconexión.
Disfruta de la tranquilidad y de no tener una agenda apretada. Busca destinos paradisíacos y experiencias gastronómicas de lujo.
Otro perfil de viajeros que surge tras el Covid-19 es el viajero zen que es el que busca experiencias de viaje profundas para el crecimiento personal.
Combina bienestar físico y mental, participando en retiros de yoga, meditación y explorando culturas locales.
Finalmente el otro perfil de viajero que surge tras el Covid-19 son los nómadas digitales que son los que trabaja de manera remota mientras explora el mundo.
Busca conexiones humanas significativas en los lugares que visita y está interesado en la cultura local.
En otras latitudes, el turismo panameño registra pérdidas por $200 millones como resultado de las protestas y el cierre de calles a nivel nacional.