Una ceremonia de inauguración sin precedentes dio el banderazo de salida a la edición de 2024 de los Juegos Olímpicos de París la noche del viernes. Fue un espectáculo que perdurará en la leyenda olímpica.
Las embarcaciones fluviales que navegaban por el río Sena ofrecieron increíbles escenas parisinas, al pasar junto a monumentos históricos en su viaje hacia el final del Desfile de las Naciones en el Trocadero, con la Torre Eiffel adornada con los anillos olímpicos como telón de fondo. El famoso monumento estaba iluminado en todo su esplendor, un verdadero faro en lo que podría haber sido una noche triste.
Fue un fuerte anticipo de lo que será el resto de los Juegos, en los que se utilizarán algunos de los monumentos más emblemáticos de la ciudad como telón de fondo para la competición.
La lluvia intentó robar el espectáculo, el cielo gris de París se abrió a los 30 minutos de un espectáculo de tres horas y media.
Cientos de miles de espectadores se alinearon a orillas del Sena vestidos con ponchos y chubasqueros, y un dosel de paraguas brotó al primer atisbo de lluvia. Sin embargo, al cabo de una hora de lluvia torrencial, algunos espectadores expuestos corrieron a refugiarse en las tiendas de campaña y otras zonas cubiertas cercanas.
Pero el espíritu olímpico no decayó bajo la lluvia. Los atletas se mostraban entusiasmados al saludar a la multitud y Francia parecía abrazar de verdad a los Juegos.
Tras un impresionante espectáculo de luces en la Torre Eiffel, una de las cantantes más emblemáticas de las últimas décadas volvió a actuar después de cuatro años. Celine Dion ha estado luchando contra el síndrome de la persona rígida, una rara enfermedad neurológica.
u interpretación de «L’Hymne à l’amour» cerró la ceremonia de forma impresionante. Vestida de un magnífico blanco, la actuación de Dion puso la piel de gallina mientras hacía retroceder los años y su increíble voz resonaba a lo largo del Sena.
Un montón de música tecno y europop acompañó a coloridos bailarines ataviados con todo tipo de atuendos rave, incluida una cantante totalmente pintada de azul que cantaba sobre un lecho de flores.
En la ceremonia inaugural actuaron el grupo de heavy metal Gojira, la cantante de ópera mezzosoprano francesa Axelle Saint-Cirel y Lady Gaga, que cantó una nueva versión de la canción «Mon truc en plumes», original de la emblemática artista francesa Zizi Jeanmaire.
La antorcha fue encendida por la estrella del judo Teddy Riner y la velocista de 400 metros Marie-José Pérec y fue transportada por numerosos atletas franceses y otros olímpicos famosos de ayer, como Zinedine Zidane, Rafael Nadal (que la llevó en un barco por el Sena), Serena Williams (que iba junto a Nadal), Carl Lewis y Tony Parker.
Y cuando la llama olímpica estalló en su pebetero, sujeto a un globo gigante, empezó a flotar.
El largo relevo de la antorcha olímpica llegó a su fin con la llama de la antorcha encendida en el pebetero.
La llama arderá en su pebetero durante las dos próximas semanas, mientras se desarrollan los Juegos de París. Durante la ceremonia de clausura, se apagará en París y se preparará para los próximos Juegos. Los próximos Juegos Olímpicos tendrán lugar dentro de dos años en Milán, Italia.
La antorcha pasó entre los legendarios atletas Zinedine Zidane, Rafael Nadal (que la llevó en un barco por el Sena), Serena Williams (que iba junto a Nadal), Carl Lewis, Tony Parker y decenas de olímpicos franceses.
Por último, el pebetero fue encendido por los olímpicos franceses Teddy Riner y Marie-José Pérec.
La llama se encendió después que el presidente francés, Emmanuel Macron, declaró inaugurados los Juegos y los dos abanderados de Francia prestaron juramento olímpico.
La pianista Sofiane Pamart y la cantante Juliette Armanet interpretaron “Imagine” de John Lennon y Yoko Ono, mientras estaban en un barco en el Sena con un piano del que salían llamas de la parte superior.
