
por: Pablo Medina
¡No Rosales, déjate de vainas! No todos “somos†responsables de que millones de venezolanos hayan huido despavoridos del paÃs, y a muchos miles les haya tocado arrastrarse por entre las selvas del Tapón del Darién para escapar de la miseria del siglo XXI.
No, Manuel: el “somos responsables†es un gentÃo. Suenas a Poliedro. Este desastre de paÃs y de nación es completa y total culpa de un régimen de delincuentes y de aguantadores de oficio, asà como de muchos trúhanes de la polÃtica venezolana que se parecen muchÃsimo a ti.
El mea culpa es bueno. Pero habla por ti, Rosales. Y si quieres agregar a otro culpable de la destrucción de Venezuela, menciona principalÃsimamente al miserable colombiano que está usurpando el poder en Miraflores, a sus bandas de pillos y a sus militares eternizados en el robo, el tipo que te jefea: Nicolás Maduro.
Entre las burradas que sueltas, Rosales, a las que ya nos tienes acostumbrados, algo se puede rescatar. Bien bueno que lo menciones. Pues parece un chiste que un tipo como tú, después de haberle jugado la camonina a Chávez y pasar un tiempo haciéndose el preso, seas el gobernador imbatible del Estado Zulia cuantas veces te lances. ¡Apestas a enchufado, Manuel Rosales!
Cuesta creer que las máquinas Indra-Smarmatic sean siempre tan “generosas†contigo. ¿O será que tú eres la muestra, la vitrina empañada y mugrienta, que usa el régimen para hacer creer que en Venezuela aún existe un poquito de democracia? Insisto, Rosales: ¡cargas un poderoso olor a enchufe chamuscado!
Seguramente por eso Capriles te eligió como caucho de repuesto, porque tú sà que eres bien bueno; pero para el régimen. Probado y jugado: ¡contigo, Rosales, el chavismo del siglo XXI cuenta para lo que sea!
Hasta para repartir las culpas del desastre-paÃs que cientos de individuos como tú, cubanos, iranÃes, chinos, rusos, todo tipo de europeos y ahora hasta norteamericanos han puesto su camión sin ningún remordimiento, para casi llevar a la extinción a uno de los paÃses más ricos del mundo en menos de 25 años.
El venezolano se ha ido espantado de Venezuela porque estos tipos del régimen han convertido a nuestro paÃs en una calamidad, en un infierno imposible de llevar a cualquier tipo de vida moderna. Ellos son el problema, ¡claro que sÃ! Pero tú, Manuel Rosales, eres parte también de ese mismo problema. Para que lo tengamos todos muy claro…
Por eso: ¡Dios, Venezuela Libre y Cese de la Ocupación!