El parlamento acordó apoyar que los delitos de ecocidio sean incluidos en la Directiva de la Unión Europea sobre la protección del ambiente a través del derecho penal.
Tras una histórica votación unánime de la Comisión de Asuntos Jurídicos en marzo de 2023, el Parlamento Europeo declaró oficialmente su apoyo a la inclusión de los delitos que tienen el nivel de ecocidio en la Directiva sobre la protección del ambiente a través del derecho penal.
El texto aprobado por el Parlamento establece que: “Los Estados miembros velarán porque toda conducta que cause un daño grave y extenso o un daño duradero o irreversible sea tratada como un delito de especial gravedad y sancionada como tal de conformidad con los ordenamientos jurídicos de los Estados miembros”. Esta definición sigue de cerca la definición internacional de ecocidio redactada por un panel independiente de expertos en 2021.
Un precedente importante
Es la primera vez que se incluye una definición de este tipo en un texto legislativo a nivel europeo. En los próximos meses, representantes del Parlamento, el Consejo y la Comisión de la Unión Europea entablarán un proceso de consulta conocido como negociaciones del Trílogo, cuya votación final está prevista para principios de octubre de este año.
En una carta abierta, Stop Ecocidio Internacional, We Move Europa y Avaaz instan a los Ministros europeos de Justicia a que tomen nota de las 600.000 firmas recogidas sobre el tema. Y aboguen por la inclusión de un delito que castigue los daños más graves al ambiente, tal y como se definen en el texto recomendado por el Parlamento Europeo.
De aprobarse la propuesta, la Unión Europea asumiría un papel de liderazgo en el reconocimiento de los delitos ambientales más graves a escala internacional. Fuera de la Unión Europea, tanto Ucrania como Rusia se encuentran entre el creciente número de países que reconocen formalmente el delito de ecocidio en su legislación nacional.
La incorporación legislativa del ecocidio en la Directiva Europea sobre Crímenes ambientales representaría un avance sustancial hacia el reconocimiento global del ecocidio como crimen autónomo, aplicable tanto en tiempos de paz como de conflicto. Sus defensores sostienen que esta medida servirá como un elemento disuasorio más potente para evitar los daños graves al ambiente y la naturaleza.
Cabe destacar que, históricamente y aún hoy en día, los agresores consideran que los daños ambientales en tiempos de guerra son accidentales. Por lo tanto, es esencial reconocer el ecocidio como un crimen por derecho propio.
Declaraciones de Sands y Mompó
Philippe Sands KC, abogado internacional y escritor, Copresidente del Panel de Expertos Independientes sobre la Definición Jurídica del Ecocidio, ha dicho: “Es muy alentador que la Unión Europea se tome en serio el concepto de ecocidio. Al igual que con el genocidio y los crímenes de lesa humanidad en 1945, la comunidad mundial se enfrenta hoy a un nuevo tipo de amenaza: los daños graves y extensos o duraderos al ambiente, de un modo que se violan las obligaciones jurídicas existentes y que corresponde al concepto emergente de ecocidio”.
Maite Mompó, Directora de Stop Ecocidio España, ha comentado: “Urge que se tome en serio la destrucción masiva de la naturaleza como una amenaza real que impulsa la gran crisis ambiental que vivimos. La creación de leyes internacionales que protejan el ambiente es vital para superar esta crisis. Y en la Unión Europea tenemos ante nosotros una gran oportunidad que no se debe despreciar, ya que hará que nos situemos a la vanguardia de naciones que piden la protección efectiva del ambiente, tanto para tiempos de guerra como de paz.”