
Por: Juan Figueroa
Club de Finanzas UCV
En el pasado, el respaldo del dinero se basaba en su propia composición; es decir, los metales de los cuales se elaboraban las monedas (como el oro y la plata) tenÃan un valor intrÃnseco que equivalÃa a su valor de cambio. Sin embargo, debido a las limitaciones de ese sistema, a finales del siglo XIX se implementó el patrón oro. Un nuevo sistema que surgió de los acuerdos de Bretton Woods, el cual establecÃa que la moneda en circulación no tenÃa valor por sà misma, sino que estaba respaldada por una cantidad determinada de oro.
A principios de la década de 1970, Estados Unidos enfrentaba problemas económicos que llevaron al presidente Richard Nixon a tomar una decisión drástica en 1971. Conocido como el «Nixon shock», puso fin a ese sistema, treinta años después de su creación, a partir de ese momento, el dólar y todas las demás monedas abandonaron el patrón oro y comenzaron a fluctuar según la oferta y demanda del mercado, sin respaldo más allá de la confianza.
El tipo de dinero, no respaldado por el oro u otro metal precioso, ni por otra divisa como el dólar, es conocido como dinero fiduciario o dinero fiat, y en la actualidad su primacÃa es clara a nivel global. Sin embargo, su valor también está influido por diversos elementos que pueden afectar al mercado de divisas, por ejemplo: el precio de materiales preciosos como el oro, los créditos del banco central o la deuda pública de un Estado, entre otros. Ahora bien, lo que resulta más importante en este mercado es la confianza que despierte una moneda; dependiendo de la confianza que provoque un Estado y su moneda, y la ley de oferta y demanda, el valor de las divisas se modificará. Es por ello que el control que se ejerce sobre el valor de las divisas es bastante exhaustivo, vigilando la cantidad de dinero en circulación y tomando medidas para devaluar o aumentar su coste, según sea necesario.
¿Qué es lo que respalda y le da valor a Bitcoin?

El Bitcoin (BTC) no necesita estar respaldado por nada tangible para ser valioso; como las monedas fiduciarias, gran parte de su valor se deriva de la confianza del consumidor.
El argumento de que esta criptomoneda no tiene valor al no estar respaldado por nada fÃsico, sigue siendo uno de los principales conceptos erróneos sobre la misma. Esa opinión ha sido perpetuada por el Expresidente de los Estados Unidos Donald Trump, asà como por el magnate multimillonario Warren Buffett, quienes han negado que el Bitcoin tenga algún valor.
La fuente de valor: Bitcoin vs. Fiat
Al igual que el dólar americano, el Bitcoin no está respaldado por una materia prima fÃsica, derivando su valor de otras formas. Dado que no tiene una entidad centralizada que refuerce su valor y no está respaldado por ningún commodity, mucha gente cree equivocadamente que esto significa que no vale nada. Sin embargo, el BTC tiene actualmente un valor unitario individual de más de 10.000 dólares, y una capitalización de mercado total definida como el valor unitario multiplicado por el número de Bitcoins en circulación de casi 190.000 millones de dólares; lo que demuestra claramente que es considerado valioso por un gran número de personas.
¿Bitcoin está respaldado por las matemáticas?
Al no estar respaldado por nada fÃsico, se fundamenta en las matemáticas que subyacen en su tecnologÃa blockchain, y su suministro controlado. Esto asegura que se mantenga limitado en su suministro y sea resistente a la censura, lo que le da algo de su valor. Como dijo Anthony Pompliano en un panel de discusión en el canal de televisión estadounidense CNBC, «Si no crees en Bitcoin, estás diciendo esencialmente que no crees en la criptografÃa». Para Pompliano, la tecnologÃa blockchain dota al Bitcoin de un valor inherente, casi como un patrón oro para las criptomonedas.
El resto del valor del Bitcoin puede atribuirse al hecho de que fue el primer sistema monetario exitoso que operó sin una entidad centralizada que moviera los hilos, lo que significa que su suministro no puede ser inflado a la fuerza; no puede ser fácilmente confiscado como lo fue el oro en los años 30, y ofrece un nivel de libertad financiera que pocas (si es que alguna) monedas fiduciarias pueden igualar. El BTC también ha demostrado tener valor de utilidad; miles de comerciantes ahora lo aceptan como pago por bienes y servicios, y se ha demostrado que está menos correlacionado con el mercado de valores que muchos otros activos, lo que lo hace útil como cobertura.
El nivel de confianza que se observa en una moneda puede ser indicado, o incluso preservado, por su nivel de uso en todo el mundo. Ya sea que esté funcionando bien en relación con otras monedas fiduciarias, en el caso del dólar estadounidense, este es y será en el futuro previsible una moneda que se puede gastar casi en cualquier lugar. Como resultado, los consumidores confÃan en él. El poder adquisitivo y la practicidad son productos valiosos en sà mismos. Aunque por otro lado, Bitcoin está todavÃa muy lejos de la adopción global. La comunidad cripto ha recorrido un largo camino desde que la primera transacción de BTC se gastó en una pizza, pero hasta que se produzca la adopción masiva, la confianza en este no será finalmente tan alta, o tan extendida, como la confianza en las monedas fiduciarias establecidas.
A pesar de sus obvias diferencias, Bitcoin resulta ser similar a la moneda fiduciaria en la medida en que está respaldada en gran parte por la confianza del consumidor. A medida que el espacio cripto crezca, también lo hará la confianza en el Bitcoin. Y dado que el valor de mercado de esta criptomoneda es un resultado directo de las fluctuaciones de la oferta y la demanda, significa que puede apreciarse cuando los tiempos son buenos, pero también puede venirse abajo si cae en desgracia.
No podemos asegurar a ciencia cierta qué nos deparará el futuro. Pero sà sabemos que un mundo de libertad y prosperidad necesita dinero sólido. Incluso si eres optimista de que nosotros como ciudadanos superaremos los problemas actuales, de que la humanidad tiene el potencial de avanzar y crear un mundo mejor, hay buenas razones para confiar en el oro (por ejemplo) en lugar de las monedas fiduciarias, ya que el oro prevalecerá sobre el dinero fiduciario y quizá, sobre las distintas monedas digitales.