Fin o continuaciĆ³n de la estafa
Ā”El equipo de investigaciĆ³n de Hey!, logrĆ³ acceder a una serie de informes que se remontan a la Ć©poca de Rafael RamĆrez, lo que permitirĆ” aclarar un poco mĆ”s acerca del entramado corrupto, montado por Tarek El Aissami en la estatal PDVSA, para continuar el saqueo de petrodĆ³lares al mismo estilo que instituyĆ³ en su momento RamĆrez.
Para iniciar este nuevo relato nos transportaremos al aƱo 2017, hace seis aƱos atrĆ”s, cuĆ”ndo las detenciones, acusaciones, peces gordos, miles de millones de dĆ³lares, bancos internacionales fueron los temas mĆ”s asociados a PDVSA en los Ćŗltimos dĆas del referido aƱo.
El fiscal designado por la Constituyente Tarek William Saab estĆ” en una cruzada contra la corrupciĆ³n en la industria petrolera venezolana y sus armas apuntan a Rafael RamĆrez, hombre fuerte en la estrategia econĆ³mica de ChĆ”vez y su grupo. El presidente Maduro suma su verbo encendido contra RamĆrez, pero muchos nos preguntamos si llegarĆ” hasta el fondo o es solo un ataque entre facciones chavistas de poder.
La crisis que azota hoy a PetrĆ³leos de Venezuela, PDVSA, tiene su origen en la polĆtica que hace ya unos 15 aƱos comenzĆ³ el rĆ©gimen chavista, destruyendo la meritocracia, despidiendo de manera irregular a cientos de profesionales altamente capacitados y colonizando la estructura de la compaƱĆa con militantes del partido de Gobierno, que desconocĆan el manejo de una industria tan compleja. La corrupciĆ³n de la mano de ChĆ”vez se ha convertido en un cĆ”ncer que ha minado de tumores malignos todo el aparato econĆ³mico del paĆs.
La PDVSA āroja rojitaā ha traĆdo como consecuencia unas estafas mil millonarias que ha hundido a la principal empresa de la naciĆ³n. Y con ella al paĆs. El gobierno chavista entregĆ³ a una misma persona āRafael RamĆrez- la presidencia de la estatal petrolera y el Ministerio de PetrĆ³leo. AsĆ creĆ³ una fĆ³rmula que liquidaba la transparencia e impedĆa auditar correctamente el desempeƱo de PDVSA.
Dicho en criollo: con el apoyo y la complicidad del Ejecutivo nacional, RamĆrez se pagaba y se daba el vuelto. Para ese momento, el presidente NicolĆ”s Maduro incurre en la misma falta al designar al mayor general de la Guardia Nacional, Manuel Quevedo, en estos dos cargos, quien desconocĆa el manejo de una petrolera. Esto demuestra que mĆ”s de querer poner orden en la casa, se continuaba con el esquema de corrupciĆ³n, para seguir el saqueo a la principal industria bĆ”sica del paĆs.
Aunque Quevedo llegĆ³ con la promesa de diversificar la economĆa, el rĆ©gimen chavista profundizĆ³ la dependencia de Venezuela del ingreso petrolero. En esa misma lĆnea, ampliĆ³ las funciones y competencias de PDVSA, asignĆ”ndole tareas ajenas a sus negocios tradicionales, desde construcciĆ³n de viviendas hasta distribuciĆ³n de alimentos. Mientras caĆa la producciĆ³n de barriles de petrĆ³leo, aumentaban los escĆ”ndalos de corrupciĆ³n como el caso PDVAL (Productora y Distribuidora Venezolana de Alimentos), donde se perdieron millones de dĆ³lares y toneladas de comida por las irregularidades en las importaciones.
Rafael RamĆrez estuvo 12 aƱos al frente de PDVSA. ĀæDurante ese tiempo nadie se dio cuenta del saqueo que se perpetraba dentro de la empresa? Medios independientes, expertos petroleros, ONG y dirigentes polĆticos de la oposiciĆ³n y hasta del oficialismo denunciaron en reiteradas ocasiones las irregularidades que se registraban en la industria; sin embargo, el gobierno chavista siempre saliĆ³ en defensa de RamĆrez y de los otros gerentes de la empresa que ahora estĆ”n siendo procesados por la justicia venezolana.
Y dĆ³nde estaba la ContralorĆa para ese momento, el organismo hacĆa un silencio ensordecedor. Lejos de asumir un rol protagĆ³nico, la instituciĆ³n pasaba prĆ”cticamente desapercibida en todo este escĆ”ndalo. ĀæPor quĆ© la ContralorĆa General de la RepĆŗblica no advirtiĆ³ a tiempo el gigantesco desfalco que ocurrĆa en PDVSA? ĀæQuĆ© hizo en su momento la ContralorĆa General de la RepĆŗblica para detectar oportunamente este hecho y evitar que se afectaran los intereses de los venezolanos? El escĆ”ndalo de PDVSA deja en evidencia la ineficiencia de la ContralorĆa General de la RepĆŗblicaā¦ o peor aĆŗn, su complicidad.
ĀæPor quĆ© Maduro no apartĆ³ del gobierno y sometiĆ³ a investigaciĆ³n a RamĆrez si sospechaba de manejos irregulares en la industria? Al contrario, llegĆ³ a designarlo vicepresidente del Ć”rea econĆ³mica, luego canciller y vicepresidente del Ć”rea polĆtica y, por Ćŗltimo, embajador ante la ONU, convalidando su actuaciĆ³n.
Maduro dijo en noviembre de 2016: ādecreto una reestructuraciĆ³n absoluta y un golpe del timĆ³n en PDVSA para vencer la corrupciĆ³n y la burocracia (ā¦) Hay que elevar la producciĆ³n petrolera y cuidar que no la roben (ā¦) Tengo pruebas de la corrupciĆ³n y la traiciĆ³n contra PDVSAā. Como parte de esa āreestructuraciĆ³n absolutaā, el presidente Maduro dio mĆ”s poder a dos funcionarios cercanos a RamĆrez, Eulogio del Pino, manteniĆ©ndolo como Ministro de PetrĆ³leo y Nelson MartĆnez, nombrĆ”ndolo presidente de la estatal petrolera.
Un aƱo despuĆ©s ambos fueron detenidos por corrupciĆ³n. ĀæPor quĆ© el presidente Maduro tardĆ³ un aƱo para tomar medidas contra la corrupciĆ³n? ĀæCuĆ”les eran esas āpruebasā que decĆa tener y que jamĆ”s expuso ante el paĆs? ĀæPor quĆ© confiĆ³ la conducciĆ³n del negocio petrolero a Del Pino y MartĆnez?
El presidente Maduro designĆ³ como presidente de Citgo a AsdrĆŗbal ChĆ”vez. Pero en lugar de asumir ese nuevo cargo, ChĆ”vez deberĆa explicarle al paĆs cĆ³mo no detectĆ³ todas estas irregularidades mientras estuvo al frente del Ministerio de PetrĆ³leo, entre septiembre de 2014 y agosto de 2015.
ĀæPor quĆ© AsdrĆŗbal ChĆ”vez āprimo del difunto presidente Hugo ChĆ”vezā no destapĆ³ la corrupciĆ³n en el sector petrolero? ĀæJamĆ”s se percatĆ³ de los negocios turbios que desarrollaban RamĆrez, Del Pino y MartĆnez, Āæentre otros? ĀæCĆ³mo puede asumir la presidencia de Citgo un funcionario que fue incapaz de advertir, denunciar y combatir las irregularidades que estaban carcomiendo a la petrolera venezolana?
La crĆtica sobre el desempeƱo de AsdrĆŗbal ChĆ”vez puede hacerse extensiva a Carlos Erick Malpica Flores āsobrino de la primera dama de la RepĆŗblica, Cilia Flores ā el flamante ministro de Finanzas, SimĆ³n Zerpa, y la presidenta de la fraudulenta Asamblea Constituyente, Delcy RodrĆguez. Todos ellos ocuparon un puesto en la directiva de PDVSA por Ć³rdenes de Maduro. ĀæQuĆ© hicieron esos funcionarios para luchar contra la corrupciĆ³n en la industria?
El nuevo presidente de PDVSA y ministro de PetrĆ³leo, Manuel Quevedo, es un mayor general de la Guardia Nacional que no tiene ninguna experiencia en el Ć”rea petrolera. ParticipĆ³ en la represiĆ³n contra las protestas que se registraron en 2014 que dejaron un saldo de 43 muertos, y Ćŗltimamente estuvo al frente del Ministerio de Vivienda. Delante de ese despacho se encargĆ³ de coordinar la MisiĆ³n Vivienda programa de construcciĆ³n masiva de viviendas que ha sido tachado como āinauditableā por los expertos en la materia.
Quevedo durante su permanencia al frente de PDVSA, hizo un llamado pĆŗblicamente a acosar a los trabajadores de la empresa que son opositores āidentificĆ”ndolos despectivamente como āescuĆ”lidosā. OlvidĆ³ Quevedo que los culpables de la corrupciĆ³n en PDVSA son militantes del chavismo, gerentes que juraron crear la āPDVSA socialistaā y terminaron amasando millones de dĆ³lares producto del robo a la NaciĆ³n.
El Gobierno trata de hacer ver que el nuevo fiscal impuesto por la Constituyente, Tarek William Saab combate la corrupciĆ³n en PDVSA, en contraste con la fiscal destituida Luisa Ortega DĆaz. Primero, debe seƱalarse que antes de que fuera removida del cargo, Ortega DĆaz adelantĆ³ investigaciones sobre irregularidades en el sector petrolero. Y segundo, tambiĆ©n debe recordarse que la hoy seƱalada funcionaria por el RĆ©gimen, es una militante del chavismo que asumiĆ³ la conducciĆ³n del Ministerio PĆŗblico en 2007 por los votos del oficialismo en el Parlamento, facciĆ³n que en 2014 la ratificĆ³ por siete aƱos mĆ”s en el cargo, a pesar de las crĆticas de la oposiciĆ³n.
Si Ortega DĆaz promovĆa la impunidad en Ć©ste y otros casos, Āæpor quĆ© el chavismo y Maduro la felicitaron pĆŗblicamente y pretendĆan atornillarla durante 14 aƱos en ese despacho? Puede afirmarse que la corrupciĆ³n en la PDVSA āroja rojitaā es el fiel reflejo del sistema de opacidad, discrecionalidad y clientelismo que ha instalado el chavismo en la estructura del Estado venezolano.
ĀæCĆ³mo pudieron robarse miles de millones de dĆ³lares en PDVSA durante aƱos en las narices de los altos jerarcas del rĆ©gimen sin que se dieran cuenta? ĀæDĆ³nde estĆ”n las auditorĆas e inspecciones? ĀæNadie se percatĆ³ de que la producciĆ³n caĆa en picada? Mientras el rĆ©gimen hablaba de soberanĆa, āguerra econĆ³micaā y lucha contra el āimperioā, la realidad era que un grupo de altos gerentes chavistas destruĆa la principal fuente de ingresos del paĆs y se llenaba los bolsillos con el dinero que hoy se necesita para comprar alimentos y medicinas. Fuentes de investigaciĆ³n seria afirman que el monto robado a PDVSA desde que se inicio el rĆ©gimen chavista asciende a $ 650.000.000.000,oo.
Maduro hoy anuncia una ālimpieza en PDVSAā. Esa fue la misma expresiĆ³n que hace 15 aƱos utilizĆ³ el difunto ChĆ”vez y que, a la postre, ha provocado el peor escĆ”ndalo de corrupciĆ³n en la historia de la industria petrolera de Venezuela.
Estamos de acuerdo con que se investigue y sancione a los corruptos de la petrolera, pero si solo es un instrumento de ataque a adversarios y propaganda polĆtica, profundiza la crisis y la corrupciĆ³n en la industria. La ācruzada contra la corrupciĆ³nā tiene que ser completa, independiente y despolitizada. Venezuela es de todos, chavistas, opositores, sus empresas y patrimonio, tambiĆ©n. Pero la equidad, la justicia y la transparencia no son principios utilizados en el rĆ©gimen, aunque sĆ son muy mencionadas.
La justicia debe seƱalar la responsabilidad polĆtica de quienes designaron a esas personas. La culpa no es del āciegoā -RamĆrez- sino de ChĆ”vez por darle el garrote durante 12 largos aƱos. Y luego de Maduro, por hacer lo mismo durante los primeros cinco aƱos de su gobierno. Y si eso ocurre en la principal industria del paĆs, de la que depende la NaciĆ³n para sobrevivir, ĀæquĆ© puede esperarse del resto de la administraciĆ³n pĆŗblica, de las cuentas de empresas propiedad del Estado donde la opacidad y discrecionalidad es la regla.