Por: Isaac Ramírez
El juego táctico desarrollado por la selección colombiana a lo largo de la Copa América lo hace un contendor muy peligroso para el juego de este domingo 14 de julio.
La forma como llegó Colombia contra Uruguay revela su fortaleza. Colombia y Uruguay se vieron las caras en una semifinal llena de emociones, donde los cafeteros lograron un triunfo ajustado de 1-0, sellando su pase a la final de la Copa América después de 23 años.
Desde el pitazo inicial, ambas selecciones demostraron su intención de dominar el encuentro. Uruguay, liderado por un dinámico Darwin Núñez, generó las primeras oportunidades claras de gol. El delantero de Liverpool tuvo en sus pies tres ocasiones que pusieron en vilo a la defensa colombiana, pero la falta de precisión y la fortuna adversa mantuvieron el marcador en cero.
El momento decisivo llegó al minuto 39. En un tiro de esquina ejecutado con maestría por James Rodríguez, quien ha sido el arquitecto de los ataques colombianos en todo el torneo, envió un centro preciso que encontró la cabeza de Jefferson Lerma.
El mediocampista se elevó por encima de la defensa uruguaya y con un potente remate envió el balón al fondo de la red, desatando la euforia de los aficionados colombianos.
La alegría de Colombia se vio empañada momentáneamente antes del descanso. Daniel Muñoz, en un acto de desesperación, respondió a las provocaciones de los jugadores uruguayos con un codazo a Manuel Ugarte, lo que le costó la tarjeta roja directa y dejó a su equipo con diez hombres.
Para el segundo tiempo, el técnico Néstor Lorenzo ajustó su estrategia. Con la ventaja mínima y un hombre menos, Colombia se replegó, apostando por el contragolpe.
Uruguay, en busca del empate, introdujo a Luis Suárez, quien estuvo cerca de igualar el marcador con un potente disparo que se estrelló en el poste.
El pitazo final desató la celebración colombiana. La última vez que Colombia llegó a esta instancia fue en 2001, se coronó campeón al vencer a México 1-0. Ahora, con la posibilidad de enfrentar al actual campeón Argentina, los colombianos sueñan con repetir la hazaña y levantar su segunda Copa América.
