Panamá se prepara para un probable aumento en el flujo de migrantes venezolanos por la selva de Darién tras la cuestionada reelección de Nicolás Maduro el domingo.
Así lo afirmó el presidente panameño José Raúl Mulino, quien expresó preocupación por la situación en Venezuela ante el rechazo causado por el presunto fraude electoral.
Destacó además la necesidad de adoptar medidas para proteger a los extranjeros y facilitar su tránsito hacia Estados Unidos.
Las cifras del Sistema Nacional de Migración, reseñó el medio local La Estrella, indican que hasta mayo pasado 109.895 venezolanos habían cruzado la selva de forma irregular, comparado con los 328.650 registrados a finales de 2023.
En un esfuerzo por controlar esta situación, Panamá y Estados Unidos firmaron un memorándum para la repatriación de migrantes sin la documentación adecuada.
Este acuerdo se presenta en un momento en que grupos numerosos llegan al centro de recepción temporal en Lajas Blancas, en la provincia de Darién, donde reciben atención médica básica y servicios esenciales.
Tras la proclamación de Maduro como ganador con más de 50% de los votos, el presidente Mulino expresó su desacuerdo con los resultados electorales, y afirmó que no representan la voluntad del pueblo venezolano.
Como resultado, Panamá retiró su personal diplomático de Caracas y ambos países suspendieron las relaciones diplomáticas.
¿Por qué los migrantes venezolanos cruzan el Darién?
El peligroso cruce de la selva de Darién se convirtió en la ruta desesperada para miles de migrantes venezolanos que buscan escapar de la crisis política y económica en su país en busca de nuevas oportunidades en Estados Unidos.
A pesar de los riesgos extremos que implica esta travesía, que incluyen terrenos inhóspitos, ríos turbulentos y condiciones climáticas adversas, muchos optan por enfrentar estos escenarios por la falta de oportunidades en su país de origen.
De continuar Maduro en el poder, se cree con certeza y sin duda alguna que la cifra de migrantes aumentará.