Militares argentinos reforzarán su Embajada en Caracas. El presidente Javier Milei ordenó el envío de militares para custodiar la Embajada en Caracas.
La orden de enviar militares a Caracas para proteger la sede diplomática se produce tras un hostigamiento del régimen de Maduro, minutos después de haber acogido a dirigentes de la oposición venezolana que están siendo víctimas de persecución.
El Gobierno de la República de Argentina recibió reportes de sus agregados de seguridad en Venezuela, de hechos irregulares con los servicios de electricidad que ocurrieron al momento de recibir algunas personas en la sede diplomática.
Los opositores refugiados en Embajada argentina denunciaron asedio del Gobierno: “Nos han cortado la electricidad”.
Hasta el momento, tanto la embajada argentina como la residencia oficial están bajo la custodia de la Guardia Nacional Bolivariana al servicio del régimen de Maduro.
La ministra argentina de Seguridad, Patricia Bullrich, tomó la decisión en enviar gendarmes a Venezuela, en coordinación con la canciller Diana Mondino, para custodiar la embajada y la residencia oficial del representante diplomático ante la posibilidad de ataques ordenados desde Miraflores, tras haber sido víctimas de cortes del servicio de electricidad.
En un comunicado oficial, el Gobierno argentino apeló a la Convención de Viena para justificar el refugio concedido a los opositores. Los refugiados están “bien”, coincidió Urruchurtu, coordinador de la campaña de la opositora María Corina Machado, en Radio Mitre.
Dirigentes opositores refugiados en la Embajada de Argentina confirmaron que están a resguardo, aunque bajo asedio del oficialismo, que, según ellos, cortó la electricidad en la residencia oficial de la Embajada de Argentina en Caracas.
De acuerdo con fuentes extraoficiales, los seis venezolanos están agradecidos por estar bajo protección y se sienten seguros en la representación diplomática argentina, dijo el escritor.
“Es una enaltecedora actitud de los argentinos por darnos refugio a seis líderes políticos que estamos siendo acosados, hostigados, perseguidos”.
Continuó diciendo: “que nos metan en calabozos, en salas de tortura y agradecemos que Argentina ha salido a darnos cobijo para que eso no ocurra”.
“Tras emitir una orden de aprehensión, comenzó un asedio a la embajada argentina en Caracas por los opositores refugiados. Nos han cortado la electricidad.
Los refrigeradores, agua y servicios elementales fueron cortados contó González Moreno. Contó que hay evidencias de videos de funcionarios de la estatal empresa eléctrica retirando “parte de los equipos que permiten sólo a la residencia del embajador argentino en Caracas estar sin servicio eléctrico”.
Se sabe que hay por lo menos seis dirigentes opositores que pidieron asilo en la sede de la Embajada argentina en Caracas y que tienen relación con el equipo de María Corina Machado, incluso parte de su equipo de prensa y estrategia están allí.
“Es parte de la persecución desatada para quienes estamos defendiendo la libertad de los venezolanos de votar libremente”, explicó González. Indicó que los opositores que pudieron inscribirse como candidatos fueron escogidos por Maduro para “permanecer en el poder”.
La Presidencia argentina manifestó su “inquietud ante el deterioro de la situación institucional y los actos de hostigamiento y persecución dirigidos contra figuras políticas de Venezuela”, en el marco de un calendario electoral diseñado a la medida de la dictadura que, en coordinación con el Consejo Nacional Electoral (CNE) controlado desde Miraflores, ha impedido la postulación de la candidata de la Plataforma Unitaria, Corina Yoris, y ha obstaculizado la inscripción y actualización en el registro electoral de los venezolanos en el exterior.
Las diferencias entre Milei y Maduro llegaron a su punto más álgido cuando el mandatario argentino entregó a Estados Unidos el avión Boeing 747 de la compañía de carga Emtrasur –filial de la aerolínea estatal venezolana Conviasa– que se encontraba retenido en el aeropuerto Ministro Pistarini, de Buenos Aires, desde el 8 de junio de 2022 por orden judicial, ante sospechas de estar vinculado con el terrorismo iraní.
Como represalia, Maduro prohibió sobrevolar el espacio aéreo venezolano a las aeronaves argentinas, además de pronunciarse contra Milei, calificándolo como bandido y acusándolo de robo del polémico avión.