Un joven hondureño de 17 años que migró a los Estados Unidos sin acompañante murió bajo la custodia del gobierno del estado de Florida, según el anuncio de las autoridades migratorias, informando que el deceso ocurrió recientemente.
El Secretario de Relaciones Exteriores de Honduras, Enrique Reina, identificó al joven como Ángel Eduardo Maradiaga Espinoza, solicitando una » investigación exhaustiva «, sobre su muerte.
Reina también informó que Maradiaga estaba recluido en la ciudad de Safety Harbor, al oeste de Tampa, que tiene un refugio usado para albergar niños no acompañados.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU (HHS), reconoció la muerte del joven en un comunicado, señalando que la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR), » está revisando todos detalles clínicos de este caso», incluidos todos los registros de atención médica de pacientes hospitalizados, añadiendo que un médico forense está realizando la investigación sobre la muerte del joven.