Un árbol líquido absorbe la contaminación en Buenos Aires. YPF, empresa argentina, es la primera en instalar un árbol líquido para purificar el aire en la ciudad. El proyecto original, Liquid 3, fue creado por el Instituto de Investigación Multidisciplinar de la Universidad de Belgrado de Serbia.
Su objetivo es brindar una solución eficiente hacia la sostenibilidad en entornos urbanos con limitaciones de espacio o fuertes niveles de contaminación en zonas donde las plantaciones de árboles no son una opción.
Este árbol líquido está instalado en la estación de servicio de la petrolera de la Avenida Figueroa Alcorta y Juramento, en el barrio Belgrano de Buenos Aires, Argentina. Se trata de un módulo de fotobiorreactores con microalgas nutrido del dióxido de carbono (CO2) y del aire para crecer, generando oxígeno y biomasa. Así se purifica el ambiente.
Los fotobiorreactores son instalaciones creadas para el cultivo masivo de algas con diferentes usos, según expuso Priscilla Minotti, profesora e investigadora en la Escuela de Hábitat y Sustentabilidad de la Universidad de San Martín(UNSAM).
La experta dio detalles sobre este sistema. “Una bomba inyecta continuamente aire del entorno (con altos niveles de CO2) y hace circular el agua para que las algas, mediante la fotosíntesis, absorban el CO2 y liberen oxígeno, al igual que otros organismos fotosintéticos como los árboles”, explicó.
Sus creadores advirtieron que esta solución biotecnológica “reemplaza” a un árbol o el equivalente a 200 metros cuadrados de césped. Las ventajas principales tienen que ver con el ambiente, que ya usa un concepto alternativo de ecologización sostenible, y sociales, porque produce “mayor conciencia sobre la protección del ambiente”.
Los beneficios de las microalgas son numerosos. Tienen la capacidad de dividirse y de crecer cuando están en condiciones apropiadas, y son capaces de fotosintetizar. Es decir, utilizan CO2, lo fijan para generar biomasa y en el proceso de fotosíntesis liberan oxígeno, acotó María Mar Areco, investigadora del Conicet y docente de la UNSAM.
Estos fotobiorreactores urbanos usan la capacidad de microalgas para destacar el CO2 y generar oxígeno y biomasa. Los expertos consideran que son entre 10 y 50 veces más eficientes que un árbol.
Cada unidad se denomina Y-Algae y ha sido producida en conjunto con la compañía Y-TEC e Inbiotec-Conicet. Según los especialistas, cada una equivale aproximadamente a 20 árboles forestales jóvenes en su capacidad de purificar el aire.
El árbol líquido serbio dispone de una estructura rectangular con un panel solar, luz de noche, un estanque “pecera” en el que hay microalgas, punto de carga USB y un asiento que alberga una capacidad para tres o cuatro personas.
¿El árbol líquido es viable?
Los estanques de este producto deben ser vaciados de manera periódica y el agua con microalgas ha de reemplazarse, por lo que la viabilidad de esta metodología en las ciudades va a depender del correcto mantenimiento.
En definitiva, todavía hay que esperar para verificar si el árbol líquido efectivamente cumple con las expectativas en cuanto a la contaminación.
